Voy a desnudarte las palabras
amor mío, callado, sufrido.
Desollaré uno a uno
tus lamentos escondidos,
niño mío, hombre de nadie.
Te despojaré los temores,
cielo mío, oscuro, dormido.
Echaré al fuego tus dudas,
al viento tus soledades.
Y volveré a amarte
como en aquellos tiempos.
María Ayala © (todos los derechos reservados)
amor mío, callado, sufrido.
Desollaré uno a uno
tus lamentos escondidos,
niño mío, hombre de nadie.
Te despojaré los temores,
cielo mío, oscuro, dormido.
Echaré al fuego tus dudas,
al viento tus soledades.
Y volveré a amarte
como en aquellos tiempos.
María Ayala © (todos los derechos reservados)
4 comentarios:
Me gusto mucho!!!
Así me dan ganas de un hombre de nadie, para hacerlo mio...
valgame, me ruborize :)
Se puede acaso volver a amar a alguien que ya se amo y pertenece al pasado? solo pregunto porque yo soy de los que cree que el amor es ciclico pero no se como tampoco se mucho de poesia pero me cuadro bastante la tuya ya te lei toda y que interesante se me presenta la poesia femenina, uno esta acostumbrado a escuchar o leer a poetas varones, grave error, de nuevo felicitaciones
Oscar de Leon Gto.
Muchos hombres suelen ser de ellos mismos, otros gustan que los llamemos "mi dueño" pero pocos, muy pocos se reconocen de nuestra propiedad...
Gracias, Claudia...ruborizarse es signo de traer los sentimientos a flor de piel, jaja, un abrazo.
Oscar:
Agradezco infinito tus comentarios. Es una lástima que no todos deseen dejarlos, porque para uno que escribe son tan importantes ya que de ellos aprendemos o bien nos motivamos para continuar por este sendero.
Recibe un cordial saludo hasta León (hermosa ciudad por cierto)
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