miércoles, 7 de noviembre de 2012

QUÉ GANAS


Qué ganas de decirte adiós sin derramar una lágrima
sin sentir el alma herida ni pensar
cuánto voy a extrañarte.

Qué ganas de no haberte amado como te amo

qué ganas de no sentir esto que siento
de no haber hecho todo lo que hice
pero ya es tarde para arrepentirme
me voy odiándome por lo mucho que te quise.

© María Ayala

1 comentario:

Dany Cooper dijo...

Una vez más, me proyecto en tu poema.

Esos amores que nos envuelven y asfixian... pero nos mantienen AHÍ!

Saludos!